martes, 29 de noviembre de 2011
Feliz 3º aniversario.
Gracias
Te había borrado de mi vida, pero a veces vuelves para amargarme la existencia. Pasaste fugazmente y me hiciste cometer algunas locuras, como tomar el sol en un tejado, aún a riesgo de partirme la crisma.
Lo único bueno es que, gracias a que decidiste que luchar por mí no valía la pena, conseguí dejarte a atrás y dar un paso en otra dirección. Hacia él.
Así que gracias, supongo.
Ethan y Helle.
lunes, 28 de noviembre de 2011
Nostalgia
viernes, 25 de noviembre de 2011
Hablo de bares.
miércoles, 23 de noviembre de 2011
I'm okay once I realize you're here.
-
- "— Peeta, ¿por qué nunca sé cuándo tienes una pesadilla?
— Ni idea. Creo que yo no grito, ni me muevo, ni nada. Simplemente me despierto paralizado de terror.
— Deberías despertarme — le digo ...porque yo interrumpo su sueño dos o tres veces cuando tengo una noche mala hasta que logra calmarme de nuevo.- — No hace falta, mis pesadillas suelen ser sobre perderte, así que se me pasa cuando me doy cuenta de que estás a mi lado."
- ~ Peeta y Katniss
- Distritos vol 2. En llamas.
- Suzanne Collins.
Catching fire.
Crecí intentando ser la mejor. pensando que el suspenso no era una opción, ni pasar desapercibida, ni carecer de ambición. Nadie me ha regalado nada, solo con talento no se llega a ninguna parte, y aunque puede que lo tuviera, desde luego no es suficiente. Crecí intentando ser la mejor y no lo he conseguido.
Pero no voy a dejar de intentarlo.
No me voy a ninguna parte. Me quedo aquí y pienso causar todo tipo de problemas.
Eternidad
martes, 22 de noviembre de 2011
Discutir.
lunes, 21 de noviembre de 2011
Lluvia.
domingo, 20 de noviembre de 2011
Siempre listos
Colecciones.
lunes, 14 de noviembre de 2011
Himno de Clan.
- En una montaña perdida en el cielo,
- se encuentra una laguna azul,
- que solo conocen aquellos que tienen
- la dicha de estar en mi clan.
- La sed de aventuras que nunca se acaba,
- la roca que hay que escalar,
- el río tranquilo que baja y se pierde
- yo nunca lo podré olvidar.
- El sol nos señala una ruta de ensueño,
- el viento nos impulsa a andar,
- temblores de vivos luceros repiten
- el eco de nuestro cantar.
- La ruta en la noche se hace más bella
- bajo un cielo plácido y gris
- millones de estrellas alumbran mi senda
- y así siempre rovers, SERVIR.
Presentando personajes - Raven
viernes, 11 de noviembre de 2011
“Implicando a la ciudadanía: Comunicación política y retos de liderazgo en la edad de las redes sociales”
Los publis con el profesor Gregory Payne, la rectora Adelaida de la Calle y nuestro profesor de Comunicación Institucional, Carlos de las Heras. |
We got a crush on Obama (8) |
Yo, portadora del micrófono de los ruegos y preguntas, con algunos de mis publis. |
Eso espero.
martes, 8 de noviembre de 2011
Hola.
domingo, 6 de noviembre de 2011
Estoy cerca
Entró en una habitación repleta de extraños aparatos que tenían aspecto de servir a algún tipo de estudio astronómico. Avanzó a través de los artefactos hasta encontrar una pequeña escalera que conducía serpenteante a una pequeña sala por encima de la primera. Las paredes eran ventanales desde el suelo hasta el techo y, aparte de eso, no había ninguna otra cosa en la habitación.
Ninguna otra cosa era ninguna otra salida.
Se giró alarmada hacia la puerta por la que había entrado, pero era demasiado tarde. Eris ya se había interpuesto con un sigilo inhumano entre ella y la única vía de escape.
— Huyendo no vales gran cosa. — le dijo Eris, casi divertida. — Eso tienes que reconocerlo.
— ¿Huir? Yo no huyo. Y menos de alguien como tú.
— Ya te vencí una vez.
— Usando tretas y trucos de mentalista. Pero matarme... eso es otra cosa. No lo conseguiste en Siheler y no lo conseguirás ahora.
— Por favor... — dijo, sacudiendo levemente la cabeza. — El miedo que tienes ahora mismo es tan grande que me martillea las sienes.
— Tener miedo no significa no estar dispuesta a luchar. Tener miedo no te impide vivir.
— Yo no tengo miedo. — afirmó Eris con rotundidad.
— Entonces acabas de sentenciarte. — dijo Helle, y cargó su arco.
Eris dio un paso hacia ella, y enseguida una saeta fue directa al corazón de la namnit. Sin embargo, Eris la esquivó con un movimiento grácil. Fue casi insultante la facilidad con la que se deshizo de la flecha de Helle, que se clavó en la pared detrás de la mujer.
— Es un buen arma, desde luego. — dijo Eris. — Pero un poco inútil en las distancias cortas.
— Pues acércate.
Eris avanzó más rápidamente hacia Helle, enfadada. Helle volvió a cargar el arco y esta vez la flecha pasó rozando el hombro de Eris justo bajo la unión de su armadura, abriéndole una herida. Un hilo de sangre comenzó a bajar por su brazo. Eris miró a Helle enfurecida y, cogiendo la espada con las dos manos, corrió hacia Helle.
Esta vez solo tuvo tiempo de tirarse al suelo y rodar, antes de que la espada de Eris cayera sobre ella. El duro metal golpeó el suelo y saltaron chispas.
— Ya estoy cerca. — dijo.
Eris & Helle.
El Regreso.
Gloria Martínez Villamandos.