Tiemblo, y me dan ganas de vomitar. Siempre tengo la misma sensación cuando creo que algo está fallando entre nosotros. Con la más mínima sospecha, mis manos dan sacudidas y el estómago se me da la vuelta.
Sé que nuestra relación es fuerte. Hemos pasado grandes obstáculos, hemos superado distancias, penas, fracasos, terceras personas, lo hemos superado todo. Quizá sea el momento de pensar que hemos pasado demasiados problemas como para poder sobrevivir uno más. Sé que es difícil imaginar como será todo esto cuando me marche a un país más o menos lejano. Aunque sé que a nuestra edad debería mirar solo por mi y por mi futuro... Simplemente no puedo hacerlo. Todo mi mundo está construido a tu alrededor. A pesar de que tengo amigos que no conoces y recorro a diario lugares en los que nunca has estado. No me refiero a eso, no me refiero a que seas lo único a lo que dedico mi vida. Tengo unos estudios, una familia, unos amigos y unos sueños. Pero sé que si tú no estás conmigo para disfrutarlos, a mi lado, se quedan vacíos, inertes.
Sí, he construido mi mundo a tu alrededor, y no quiero saber como será sin ti. Es cierto que puede que me marche, de Erasmus, pero volveré un día. Sé que te sentirás solo en Granada y puede que allí conozcas a alguien, pero volverás a Córdoba, volveremos los dos, y compartimos demasiadas cosas como para tener la suerte de no volver a encontrarnos. Y ya lo sabes, si lo nuestro se termina por mi culpa, porque yo me voy lejos de ti, cuando volvamos me dará igual cuantas novias tengas y cuánto las quieras. Te besaré nada más verte y serás sólo para mí. Habré dado tiempo suficiente al mundo para que te disfrute. Me dolerá cederte durante unos meses, pero eres mío, eres sólo para mí y lo sabes. Hay demasiadas promesas, demasiadas fotografías, recuerdos, memorias, imágenes y sueños que hemos forjado juntos, y no van a desaparecer.
Así que ya sabes, te quiero hoy, te querré siempre, y ni todas las mujeres y todos los kilómetros del mundo van a apartarte de mi lado.
Tenlo presente.